11/ Marzo/ 2003 Philippines, España and Iraq on the USA foreign politique By Agustín Pascual ("kaibigan kastila").

    Así como, en 1898, España era -según Estados Unidos- una potencia maligna, opresora de cubanos, filipinos y portorriqueños y, en definitiva, un peligro para la humanidad, en los tiempos actuales, la Administración norteamericana ha colgado el sambenito a Irak.

    Kaibigan kastila es una página dedicada a fomentar las relaciones entre Filipinas y España. Con el actual sistema educativo, los españoles desconocen gran parte de su historia. Con el sistema educativo americano, los filipinos fueron educados en el odio a España como medio de ocultar la brutal ocupación norteamericana. Son las relaciones hispanofilipinas el objeto de esta página, pero en una situación como la actual, en la que la más poderosa potencia mundial amenaza a un pequeño pais como Irak, Kaibigan kastila no puede callar. La historia se repite.

    Si, en 1898, España hubiese ganado la guerra a Estados Unidos. O si, desde 1899, Filipinas hubiese podido resistir la guerra contra los invasores norteamericanos, seguramente hoy no serían los Estados Unidos la potencia imperialista, amezanante de toda la humanidad, que son.

    Pero la historia corrió a favor de Estados Unidos. Su poderío industrial, respaldado por el poder de las armas, hizo de ellos una potencia casi imbatible. Conscientes de ello han ido imponiendo su pensamiento a todo el mundo. No admiten otras culturas, otras economías, otro pensamiento que no sea el de sumisión a su poderío. Se ven tan fuertes, tan imbatibles, que -en la actual situación respecto a Irak- ya dicen que "no necesitan autorización de la ONU para atacar". Como antes dijeron no al Tribunal Penal Internacional (para que sus crímenes contra la humanidad no puedan ser juzgados) y a tantas otras organizaciones internacionales de las que, formando parte, han rechazado cualquier medida que no fuese de su agrado.

    El mundo (lo que quede de él tras las guerras con que nos amenazan) acabará devorado por estas bestias del petróleo (Bush, Powell, Rice,... Blair y Aznar como cabezas visibles, pero la Exxon Mobil Corp. (ExxonMobil, Mobil y Esso) y similares como cerebro real de la situación) que -en nombre de la libertad- van a bombardear a civiles iraquíes. ¡En nombre de la libertad y dignidad de los pueblos van a destruir las escuelas, los hospitales, las viviendas,..., que quedaron en pie tras su intervención de 1991 (además de los bombardeos diarios, desde entonces, en las "zonas de exclusión")!.
    ¡ Qué cinismo !

    Permitan, pues, que Kaibigan kastila, una página cultural, de acercamiento entre pueblos, alce su voz contra la barbarie y tienda su mano a aquella parte de la humanidad horrorizada por la falta de escrúpulos de dirigentes políticos que, defendiendo los intereses económicos de sus amos (las grandes empresas), no dudan en permitir que bombas norteamericanas y británicas acaben con la vida de niños que aún no han tenido tiempo de conocer el falso mundo en el que viven, de madres que han parido para ver a sus hijos destrozados bajo los escombros de sus viviendas, de padres cuyos intereses dicen defender quienes los matan.

    Esta voz que se alza, se une a la de tantos millones de ciudadanos de todo el mundo que se enfrentan, no sólo a los dirigentes de los Estados Unidos, sino a los de sus propios países (en España, según encuestas del pasado febrero, el 91% de la población está en contra de la guerra. Es decir, hasta los propios votantes del partido del Gobierno lo están).

   
    Entre estas voces no podemos olvidar las que proceden de los propios Estados Unidos: Martin Sheen, Susan Sarandon, Sean Peen o Angelica Huston (por citar algunos nombres conocidos) han puesto en peligro sus carreras profesionales por denunciar la inhumana política de su Gobierno. Como ellos, premios Nóbel , antiguos combatientes de Vietnam, autoridades religiosas y miles de civiles anónimos que han salido a las calles norteamericanas para decir no a la guerra.

    Ellos son verdaderos patriotas norteamericanos. Lo son porque quieren ser ciudadanos de una gran potencia, no de un gran Imperio que arrase al resto del mundo. Quieren del suyo un país solidario, generoso, que contribuya a crear una humanidad más feliz... Saben que eso no lo logran las bombas.

    Permitan, nuevamente, que Kaibigan kastila alce su voz contra la barbarie
    Filipinas, España, el Mundo ¡contra la guerra!

Read "Manila to Baghdad", by Yamin Zakaria http://www.geocities.com/Tokyo/Pagoda/7029/philiraq.html 1