Hay varias versiones de este romance. El lector hallará interesantes los siguientes enlaces: hispanismo.org y www.boixo.com/romance.htm.

La versión que yo aprendí a los 7 años no coincide del todo con ninguna de las que he leído recientemente. Reconstruyéndola (con algún margen de error no descartable) sería aproximadamente como sigue:

ROMANCE DE DON BOISO

Lunes era, lunes
de Pascua florida,
guerrean los moros
los campos de Oliva.
¡Ay campos de Grana,
ay campos de Oliva,
cuánta buena gente
se llevan cautiva!
Entre ellos llevaban
a la infanta niña;
cubierta la llevan
de oro y pedrería.

A la reina mora
la presentarían.
¡Tomad, vos, señora,
a la cautivita,
que en España toda
no la hay tan bonita!
¡Tomad vos, señora,
a la cautivada,
que en España toda
no la hay más preciada!
No la quiero, no,
a la cautivada,
que el rey, que es mancebo,
me la enamorara.
¡Mandadla, señora,
a lavar al río,
allí dejará
hermosura y brío!
Paños de la reina
va a lavar la niña;
lloviendo, nevando,
la color perdía.

Madruga Don Boiso
al romper el día,
a tierra de moros
a buscar amiga.
Ésta halló lavando
en la fuente fría:
¡Quítate de ahí, mora,
hija de judía,
deja a mi caballo
beber agua fría!
--¡Reviente el caballo
y quien lo traía!,
que yo no soy mora
ni hija de judía,
sino una cristiana
que aquí estoy cautiva.
--¡Oh qué lindas manos
en el agua fría!
¿no querís veniros,
en mi compañía?
--Con un hombre solo
yo a fe no me iría,
por los altos montes
miedo te tendría.
--Juro por mi espada,
a honra ceñida,
de no hacerte mal,
más que a hermana mía.
Y digas, la niña,
la niña garrida,
¿has de ir en las ancas
o has de ir en la silla?
--Montaré en las ancas
que es más honra mía.

A ancas del caballo
la niña subía.
Tierras van andando,
tierras conocía,
tierras va mirando
da en llorar la niña.
--¿Por qué lloras, flor,
por qué lloras, vida?,
¡maldígame Dios
si yo mal te haría!
--¡Ay campos de Grana,
ay campos de Oliva,
veo los palacios
donde fui nacida!
Cuando el rey mi padre
plantó aquí esta oliva,
él se la plantaba,
yo se la tenía.
Mi madre la reina
cosía y bordaba;
yo como chiquita
la aguja enhebraba;
mi hermano don Boiso
caballos domaba.
¡Abrid puertas, madre,
puertas de alegría,
por traeros nuera
traigo hermana mía!
--¡Si me traes nuera,
sea bien venida!
Para ser mi hija,
¡qué descolorida!
--¿Qué color, mi madre,
qué color quería,
si hace siete años
que pan no comía,
si no eran los berros
de una fuente fría
do culebras cantan,
caballos bebían?
¡Si no eran los berros
de unas aguas margas
do caballos beben
y culebras cantan!
¡Válgame Dios mío,
y Santa María!
¡Ay campos de Grana,
ay campos de Oliva!